El buen hábito de comer naranjas es un acierto seguro para nuestro organismo en todas sus facetas, desde el aporte vitamínico, ingesta de fibra, antioxidantes, etc . Pero comerlas estando embaraza va mucho más allá, ya que estamos cuidando antes de que nazca a nuestro hijo.
¿Qué ventajas nos proporciona comer naranjas durante el embarazo?
Ayuda a evitar problemas de estreñimiento a las embarazadas
Cuando el consumo de naranjas es regular, es un aporte rico en fibra, con lo cual ayuda a no tener problemas de estreñimiento muy normal en las mujeres embarazadas, incluso derivan en problemas de hemorroides.
Protege el sistema óseo del bebé
Podríamos decir que es una de las principales razones para comer naranjas por parte de la mujer en estado de gestación, ya que ayuda, fortalece y protege a los huesos del futuro bebé. La razón es que la naranja aporta una gran cantidad de calcio, esencial en la formación del sistema óseo.
Beneficia al cabello y el estado de la piel
La naranja es rica en vitamina A y beta-caroteno, estas dos características ayudan en el estado de gestación de la mujer a mejorar su cabello y posibles manchas que salen en la piel. Para hacer frente a dichos inconvenientes es muy recomendable el consumo de naranjas.
Fortaleza del sistema inmunológico
Otra de las razones de incluir la naranja en la dieta de las mujeres embarazadas, es que contribuye a mejorar el sistema inmunológico, gracias al elevado índice de vitamina C que aporta esta fruta a nuestro organismo.
Ayuda al sistema muscular
Cuando una mujer esta en período de gestación, su movilidad suele ser más limitada, esto provoca que algunas mujeres sufran los llamados "calambres". El consumo de naranjas aporta al organismo potasio, un mineral esencial para el funcionamiento del sistema muscular.
El estado de gestación es un periodo muy importante y delicado en la mujer, cualquier alteración en su dieta, debe de estar controlada y revisada por su ginecólogo.